SU ORIGEN

Dícese que San Lucas Evangelista pintó esta sagrada Imagen de la Madre de Dios, y estuvo en Jerusalén hasta el siglo V. Que a mediados del mismo siglo fue trasladada a Constantinopla, donde la Emperatriz Pulqueria levantó suntuosa Basilica para su mayor decoro y veneración: y que en el siglo XV Gregorio Bassarión, Patriarca de la Ciudad Imperial, que había sido honrado por el Papa Eugenio IV con el Capelo Cardenalicio , viendo que tan sagrada Imagen podria ser profanada por turcos y cismáticos, llevóla a Roma y regalósela al Soberano Pontífice,en gracia de la distinción que le acababa de hacer. Así lo escribe el R. P. Fr. Agustín Arques (2), pero la rigurosa critica de hoy sólo admite esta leyenda como tradición piadosa, y como tal la trasmitimos a nuestro pueblo.

Más cierta es la creencia de que nos viene de Roma, pues se funda en un hecho histórico. Dice Escolano que por los años 1445 hallábase el Papa Eugenio IV acosado por el capitán Francisco Sforça, que con muy grande ejercito se había entrado por tierras de la Iglesia , y queriendo defender sus derechos, pidio auxilio al Rey D. Alfonso V de Aragón (3). Vio muy justificada el Rey la demanda del Soberano Pontífice, y envióle tropas auxiliadoras bajo el mando de D. Jimén Pérez Ruiz de Corella (4). Era D. Jimén uno de los héroes más insignes de aquel siglo y muy de la privanza del Monarca. Tratábase, además, de defender la causa de la Iglesia y por este doble motivo tomó tan a pecho el valeroso caballero la defensa de los Estados Pontificios , que con júbilo de su alma se llos devolvía al Papael año 1448, después de pasar los mayores trabajos en los años que duró la guerra. Ocupaba ya la Silla Apostólica Nicolás V, el cual, queriendo manifestar su gratitud al invicto capitán, concedióle algunos bienes eclesiásticos. Una de las joyas preciosas que D. Jimén recibió del Papa en esta ocasión fue la santa Imagen de la Madre de Dios de que venimos hablando, y que sin duda alguna estimó muchísimo más que si le hubiera dado la posesión de todo un reino.

Este mismo año de 1448 compró D. Jimén a su Monarca la villa Baronía de Cocentaina, firmándose las escrituras , como dice Escolano , en el sitio de Pompilia, reino de Nápoles, el día 28 de Agosto (5). Aprovechó el Rey esta buena coyuntura para agradecer a su fiel amigo y leal caballero los muchos y buenos servicios  que había prestado a su Corona, y dióle el titulo de Conde en los estados que le acababa de comprar. Habiendo recibido, pues, el señor de Corella tan noble distinción, partióse a Cocentaina para tomar posesión de su nuevo condado. Quiso tomar el devoto Conde por compañera principal de su viaje la que había de ser verdadera Señora de sus Estados, y él mismo llevó consigo la sagrada Imagen de la Madre de Dios, que el Papa Nicolás V le había regalado, y con gran reverencia la colocó en la Capilla de su Palacio Condal. En esta Iglesia, dedicada a San Antonio Abad (que todavía se conserva hoy en dicho Alcázar), fue venerada esta santa Imagen con el titulo de la Concepción de María desde el año 1448, en que el primer Conde de Cocentaina la trajo de Roma, hasta el 19 de Abril de 1520, en que por un maravilloso y estupendo milagro cambió el antiguo titulo por el que hoy tiene (6).

 

 

 

(2) Arques.  Breve historia de Nuestra Señora del Milagro (Madrid, 1805).

(3) Escolano. Historia General del Reino de Valencia (Valencia, 1879).

(4) Arques , obra citada. Escolano dice «bajo el mando de D. Ramón Boil»; pero nos asegura también que el señor de Corella fue uno de los capitanes que sirvieron en aquella jornada, y que en su tiempo existía aún la tabla que el Papa mandó poner sobre la portada de San Juan de Letràn (Roma), con la Imagen del rey  D. Alfonso V  y los nombres y escudos de los capitanes que tomaron parte en la guerra , entre los cuales figuraba D. Jimén Pérez Corella. Libro IX. cap. 45 de la obra citada.

(5) Escolano, obra citada.

(6) Arques, obra citada.